Pero antes de nada, os pido no quedaros sin leer la fantástica entrevista que la escritora Cristina C. Pombo me ha concedido sobre su adictiva novela La caricia de la bestia:
¿Podrías hablarnos un poco sobre ti y sobre tu trayectoria como escritora?
Soy de Ourense y me dedico a la escritura (novelas, artículos, guión de TV, traducciones…) y a la docencia de letras y música. Este es mi primer thriller.
¿De qué trata La caricia de la bestia?
Bueno, el argumento, como novela policial que es, desarrolla la investigación de un extraño suceso (dos chicos que tontean en el bosque son atacados por un ser al que ambos describen como un zombi) por parte de una pareja de policías, Laura Tébar y David Merino que acaban de empezar a trabajar juntos, muy a pesar de ambos pues su inicio como pareja laboral es de lo más desafortunado. Pero como creo que los argumentos e incluso los géneros solo son excusas para hablar de temas de mayor calado, yo diría que este libro habla de cómo son las relaciones de poder, las de género, las familiares, las de amistad… del miedo a lo desconocido, a la muerte, a uno mismo, al amor y la vulnerabilidad que este conlleva, del miedo al cambio, del miedo a admitir que todos somos o podemos ser una auténtica bestia…
¿En qué género se enmarca y a qué público va dirigido?
El género, como te comentaba, es thriller y creo que va dirigido a cualquier persona que le guste leer. No creo necesario que te guste especialmente este género para disfrutar con su lectura.
¿Qué nos puedes contar sobre sus protagonistas?
Bueno, parece que los protagonistas son el plato fuerte de este libro (y así lo ratifican las opiniones que estoy recibiendo, la gente me dice que los echa de menos, que quiere más de Tébar y Merino). Yo creo que son personajes muy reales, muy imperfectos, muy alejados de estereotipos. Cuando acabé de escribir el libro me encontré echándolos de menos 😀
¿Cuál de tus personajes tiene más de ti? ¿Y cuál te encantaría que fuera uno de tus amigos en la vida real y otro que nunca salte del papel?
Bueno, creo que todos los personajes tienen algo de mí, porque en todos pongo mucha comprensión y cero enjuiciamiento, lo cual quiere decir que entiendo profundamente sus maneras de actuar, sus miedos, sus miserias… En ese sentido todos son proyecciones de mis formas de analizar y comprender al ser humano, supongo. Quizá sería amiga de Los Foris, dos secundarios medio freaks, que me hacen mucha gracia. Y también de Elena Diéguez.
¿Habrá secuela de La caricia de la bestia o tienes previsto nuevos proyectos?
Tengo la segunda parte tomando forma en mi cabeza. Antes o después tengo que empezar a sacarla al papel.
¿Qué te hizo escribir La caricia de la bestia? ¿De dónde vino la inspiración?
Me apetecía probar con el thriller, ya que ahora parece estar tan de moda, y andaba a la caza de una idea de la que partir cuando leí una noticia de esas en las que parece que la ficción supera a la realidad: y ahí estaba, el origen de toda la trama delante de mí. Fue una sensación muy chula notar cómo de una noticia, en cuatro o cinco puntos, se formaba el esquema básico de la trama en mi cabeza. Esas partes del proceso de escritura molan mucho.
Libros y/o autores predilectos. ¿Alguno que te haya marcado especialmente?
Muchos, es difícil enumerarlos. Lionel Shriver, A.M. Homes, Caitlin Moran, Paul Auster, Virginia Woolf, Enrique Vila-Matas, Juan José Millás, Margaret Atwood, Aldous Huxley, las hermanas Brontë, Dumas, Flaubert, Michel Ende, J.K. Rowling (soy fan de Harry Potter hasta la médula), Sue Townsend (toda su serie sobre el personaje Adrian Mole es fantástica)…
¿Y de niña?
Michel Ende, muchísimo. Momo y, sobre todo, La Historia Interminable los leí por primera vez con nueve años y no los he dejado de leer cada cierto tiempo, hasta el día de hoy. No sería quien soy ahora mismo sin haber leído esos libros a una edad tan temprana.
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| https://themichaelmacrae.deviantart.com/ |
¿Siempre quisiste ser escritora?
Supongo que de alguna manera, sí. No concebía nada que no tuviera que ver con las letras, aunque, lógicamente, di muchos rodeos antes de llegar.
¿Qué rutina o manías tienes a la hora de escribir? ¿Eres muy sistemática o, por el contrario, muy caótica?
Pocas manías, la verdad. Estar sola y que no me molesten bajo ningún concepto, claro. Mi ordenador. Mi pizarra por si tengo que apuntar o hacer esquemas. Y no tener ninguna otra obligación posterior a escribir, es decir, necesito el día entero para ello, aunque luego no escriba más que tres o cuatro horas, el resto del día tiene que ser para leer, o escribir, o hacer deporte… pero ninguna otra obligación laboral o personal. Soy bastante sistemática, muy de esquema previo, puntos de giro muy claros, personajes muy trabajados antes de empezar a escribir… Esas cosas. Y también suelo llevar una libreta a todas partes. Continuamente suceden cosas alrededor que no quiero perderme y tengo que anotar.
¿Cuánto te llevó escribir La caricia de la bestia?
Poco, la verdad. El primer borrador estaba listo en menos de cinco meses. Luego vinieron las correcciones y las reescrituras, claro.
¿Nos podrías contar alguna anécdota o situación curiosa que te ocurriera mientras escribías La caricia de la bestia?
No sé, creo que no me pasó nada curioso relacionado con su escritura. Bueno, sí, a veces cuando, después de un par de días sin ver a nadie, quedaba con alguna amiga y, hablábamos de cosas que nos habían pasado esos días sin vernos, me sentía un poco rara por no poder contar algo de Tébar y Merino, por no poder hablar de ellos como hablarías de tu compañera de piso, o de tus padres, o de tu pareja… o sea, de alguien muy cercano con quien convives día a día. Al final, durante el proceso de escritura, te pasas tanto tiempo con gente que no existe y llegas a conocerlos tan bien, que cuando hablas con gente que sí existe te sientes algo extraña teniendo que recordarte que no puedes ponerte a hablar de tus personajes como la otra persona te habla de su familia o amigos. Básicamente porque ellos existen y tus personajes, no.
¿A la hora de publicar te encontraste con muchos obstáculos? ¿Cómo fue publicar con una editorial tan conocida como Espasa?
Pues tuve mucha suerte porque un amigo me puso en contacto con la editora, Miryam Galaz, le pasé una novela que tenía escrita, se la leyó enseguidita, me dijo que le había gustado mucho y que seguro que íbamos a hacer algo juntas pronto. Cuando le presenté la idea de La caricia de la bestia, la recibió con entusiasmo y nos pusimos a ello rápidamente.
¿Le darías algún consejo a aquellos que sueñan con convertirse en escritores?
Leer. Mucho. Y escuchar. Escuchar mucho y bien es lo mejor para saber cómo funcionamos los humanos. Y creo que escribir novelas, al final, se trata de eso.
¿Tienes alguna web o blog desde donde los lectores puedan informarse más sobre tus obras? ¿En qué redes sociales podemos encontrarte?
Bueno, sé que tendría que hacerme un blog o una página web, pero procastino que da gusto. Aún estoy muy pez en redes como plataforma para mi trabajo, pero bueno, se me puede encontrar aquí:
En twitter, Cristina C. Pombo @missiscarro
¿Dónde podemos adquirir La caricia de la bestia?
Pues sé que está en grandes superficies (FNAC, Casa del Libro, Corte Inglés…) y, por lo que me ha contado gente amiga, también en muchas librerías pequeñas. En mi ciudad (Ourense) está en Tanco, La Viuda, Espacio Lector Nobel… e imagino que en más. Espasa es mucha Espasa 😀
Por último, ¿qué les dirías a nuestros lectores para que se animen a leer La caricia de la bestia?
Pues que las reseñas que he leído hasta ahora dicen que es muy entretenida, con unos personajes inolvidables y que te llegan profundamente, que se lee muy fácil, que tiene mucha cara de película, que da gusto encontrar personajes femeninos no estereotipados… En fin, que parece que su lectura se disfruta mucho. Desde luego, yo, su escritura la disfruté como una enana. Igual eso cuenta.
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| https://themichaelmacrae.deviantart.com/ |
Espero que os animéis a participar y que añadáis a vuestra lista de pendientes esta adictiva y original novela negra que combina lo mejor del thriller y el misterio. ¡¡Buena suerte!!
Título: La caricia de la bestia
Autor: Cristina C. Pombo
Género: Novela negra, Thriller
Editorial: Espasa (Planeta)
Formato: Papel y Digital
Páginas: 440
Precio: 19,90 € (Papel) y 12,99 € (Digital)
ISBN: 978-84-670-5042-4
Argumento: En un bosque solitario, dos adolescentes son brutalmente atacados por un ser de una fuerza sobrenatural. En su declaración, ambos sostienen que el agresor es un zombi.
La inspectora Laura Tébar es encargada de la investigación. Se trata de una profesional de 55 años, brillante, solitaria y con un carácter temible forjado en un pasado lleno de errores imposibles de remediar. Se la respeta y se la teme a partes iguales. Con Tébar, y a su pesar, comienza a trabajar el subinspector Merino, un joven tan inexperto como intuitivo y motivado.
Los dos no pueden ser más opuestos y no tardan en chocar. A través de la novela, el lector asistirá a un auténtico tour de force entre ambos personajes, que pasarán lo suyo antes de permitirse el mínimo respeto mutuo que les permita colaborar y enfrentarse a unos seres tan misteriosos como violentos, que atacan desde lo más profundo del bosque, parecen invulnerables y desaparecen sin dejar rastro.
Cristina C. Pombo trama una intriga originalísima que supone una vuelta de tuerca en el thriller contemporáneo, un género en que parecía que todo estaba inventado y al que, sin embargo, le faltaba traspasar una última frontera que, literalmente, está en el más allá.
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Aunque algunos títulos como Chacal me sonaban, nunca antes había oído hablar de Forsyth ni leído nada de él. Cuando Babelio me avisó de que podría reseñar su autobiografía sentí cierta inquietud, no sabía que esperarme. Indagué un poco en la red sobre el autor y descubrí para mi asombro que era tan conocido o más que otros escritores del género como John Le Carré o John Grisham. Ahora, tras haber leído El intruso, me alegro de mi suerte. Además de ser un libro sumamente entretenido, he aprendido un montón de los conflictos políticos y armados de los que Forsyth fue testigo como corresponsal y de sus propias andanzas cuando solo era un chiquillo o ya un escritor de fama mundial en busca documentación para su nuevo libro. 
